En un entorno económico como el actual en el que los tipos de interés están por los suelos (recordemos que el Euribor está en negativo) los tradicionales plazos fijos ofrecen una rentabilidad muy baja por lo que han proliferado otros productos que ofrecen una tasa de rentabilidad más elevada. Como siempre, a cambio de esa mayor rentabilidad, el riesgo que conlleva la contratación también es más elevado.
Un claro ejemplo lo constituyen los depósitos estructurados que son definidos por el Banco de España como aquellos depósitos bancarios en lo que la rentabilidad está vinculada a la evolución de uno o varios índices bursátiles, de la cotización de un grupo de acciones, etc. Continúa leyendo DEPOSITOS ESTRUCTURADO: QUE DEBO SABER ANTES DE CONTRATAR